A menudo creemos que la acción es una vía mucho más fácil que el pensamiento, pues éste necesita decidirse acerca del camino. Lo cierto es que hay gente en principio muy dotada para la acción que no puede evolucionar debido a su falta de entrenamiento, lo cual viene a demostrar que el asunto no es tan sencillo.
De Bono nos deslumbra de nuevo con otro producto de su creativa mente. Después de haber transformado la mentalidad empresarial con sus libros anteriores, dedica ahora su enorme y constante energía a los modos y maneras que puede adoptar la acción en cada personalidad humano.